Aprendí a desarrollar modelos antes de distinguir una abeja de una avispa (bueno… ¿quién dice que haya aprendido a distinguirlas?) y mis primeras publicaciones fueron teóricas. Aunque, hoy en día, dedico más tiempo y esfuerzo a los estudios experimentales que a los modelos, los modelos constituyen una herramienta útil que me acompaña y permea mi trabajo experimental. He utilizado distintas técnicas de modelado para responder un amplio abanico de preguntas (evolución de la comunicación, termorregulación, mimetismo, forrajeo, redes de polinización, elasticidad de la seda…) y siempre estoy dispuesto a aceptar un nuevo desafío. No dudes en contactar conmigo si quieres embarcarte en un nuevo proyecto teórico y necesitas ayuda o consejo.